Tenet
Si hay algo que puede devolverme a las salas de cine en medio de una pandemia mundial, es una película de Nolan, ya que no puedes estar concentrado en otra cosa que no sea el filme. El uso de la mascarilla por más de dos horas, estar vigilante de si alguien se sienta demasiado cerca, estar consciente de no tocarte la cara… “Sólo Nolan puede sacarme de este estado de paranoia en el que llevamos viviendo desde hace meses” …pues, ¿la verdad? No fue así.
Con un premisa no tan distinta y no menos complicada que la vida real, Christopher Nolan, más ambicioso que nunca, nos demuestra una vez más que es el storyteller por excelencia y, como ya es costumbre, deja a su audiencia boquiabierta, sacando conclusiones muchas veces absurdas -y otras no tanto- de la locura narrativa a la que hemos sido expuestos por horas.
Debido a dicha locura narrativa es que me ha tomado tiempo digerir el filme, lo cual me ha costado trabajo no por la dificultad en sí de entenderlo, sino que, debido a su mismo carácter de complicado, me atrevo a decir que me ha aburrido hablar de ella. Nolan le exige al espectador un nivel de concentración mayor que con cualquiera otra de sus películas, y la convierte en un reto, no sé si llamarlo intelectual, pero de reflexión tan profundo, que la vuelve tediosa a mi parecer. No sé si tiene que ver el hecho de que estamos en medio de tanto caos en nuestra propia vida que llega Tenet a llenarnos la cabeza de demasiadas preguntas sin respuestas o es que definitivamente, esa parte narcisista del director no me agrada para nada, ¡y vaya que me gustan los directores narcisistas!
Tenet, palabra que al derecho y al revés se lee de la misma manera, presagio de que no importa cómo sucedan las cosas, al final siempre será lo mismo, y su premisa, o lo que creo que es, es que se debe destruir por completo a la Humanidad ya que está totalmente perdida y no hay otra manera que hacerla desaparecer y volver a empezar. Un tema que, en lo personal, se me ha pasado por la cabeza una que otra vez al ser testigo y muchas veces parte de nuestro problema como sociedad.
La destrucción puede ser alcanzada por un algoritmo inventado por una científica del futuro, quien lo ha dividido en nueve partes y lo esconde en el pasado. Andrei, el villano de la historia, interpretado por un grandísimo Kenneth Branagh, sabe del algoritmo y lucha por encontrarlo desde su juventud para ser él quien acabe egoístamente con la Humanidad.
No es sencillo determinar cuál es el tema de la película sino hasta el final, es decir, sabemos que están en la búsqueda de algo que evitaría un caos mundial, pero es no es hasta el final cuando entendemos que hay un algoritmo que destruirá la Humanidad, lo que vemos al final pero que realmente es el principio. Es allí donde se radica lo más complicado del filme, en entender la inversión temporal no sólo como concepto sino como la acción que reina dentro del film.
No es una película sobre viajes en el Tiempo, sería demasiado sencillo colocarlo de esa manera, se trata realmente del concepto físico de la simetría de inversión temporal. Se debe ir conociendo dicho concepto ya que, de lo contrario, tratar de entender la película se vuelve misión imposible, tal y como me ocurrió a mí, que, a pesar de acercarme al concepto, la cinta, aun, me parece demasiado: Demasiados cambios de tiempo, demasiada información y demasiado de John David Washignton, que, en lo personal, y a pesar de ser el hijo de Denzel Washington, me parece terrible.
Es una película sin duda abstracta y voy al hecho de que me gustan las películas difíciles de descifrar, pero la veo más como un desorden argumentativo y narrativo que cualquier otra cosa. No le quito la genialidad a Nolan, que para escribir algo así, vaya que se debe tener talento y paciencia, también por tener la capacidad de dirigir a sus actores de manera que parezcan humanos sin ser humanos, tan fríos como el ambiente de la película.
No sé si la paranoia de la pandemia pudo más y se llevó parte de mi concentración, o simplemente esta película perfectamente ejecutada y muy interesante pero tan complicada, hizo que perdiera mi interés y a pesar de que nunca pensé que iba a suceder, me perdí en mis pensamientos durante muchos momentos, lo cual es la primera vez que me pasa con Nolan. Espero que sea la última.